PyD entrevistó al Dr. Héctor Cohan, médico, egresado
de la Universidad
Nacional de Córdoba que ejerce en la ciudad mediterránea y que
trata a sus pacientes con el método orinoterapeútico. Pero no todo se reduce al
orín, como podrá observarse en esta primera parte de la nota.
Una entrevista de Juan Carlos Sánchez
Médico invitado Psicoanalista Dr. Fernando
Spangenberg
Una producción de Alexis Spangenberg
Resulta casi imposible limitar la
entrevista a la mera transcripción del casete grabado.
Ello sucede porque Héctor Cohan es
gestual, esto es, habla con todo el cuerpo y además prueba sus asertos de la
manera más riesgosa ante el periodismo: probándolos en el mismo periodista a
quien transforma en su paciente. De esta forma no puede permitirse el menor
error pues este se reflejaría en la nota y nadie concede una entrevista para
salir mal parado de ella.
Dos horas y media compartimos una
experiencia novedosa y quien entrevistó a Cohan se acostó en la camilla y fue
sujeto de examen.
Los resultados serán publicados en
breve.
PyD agradece muy especialmente al Dr.
Fernando Spangenberg el valioso aporte de su ciencia que nos permitió
adentrarnos en terrenos demasiado específicos y calificados para un
periodista.
La
entrevista:
PYD.
Dr. ¿Ud. me dice que el orín se puede tomar? ¿Porqué?
DR. HÉCTOR COHAN - Ud. haga mención, haga un paralelismo entre
el otoño y el organismo del paciente. Las hojas caen, esas hojas se transforman
en el ente del árbol, a través de sus raíces que las reabsorben. Estamos en
presencia de un ciclo biológico natural, nosotros somos imagen y semejanza de
Dios, somos un fiel reflejo de la naturaleza, un fiel reflejo de los ciclos
biológicos de la naturaleza.
La orina hace exactamente eso, actúa
como una auto vacuna.
En cualquier enfermedad entre
comillas, la auto inmunidad del
paciente, las autodefensas del paciente están disminuidas. Ante un agresor, esas
células no saben qué hacer, se inhiben y en esa orina que va a ponerse el
paciente en gotas, o tomándola, o acariciando su piel, o haciendo baños de piel,
o haciendo baños con sus manos, o bañándose con orina, hay toda una connotación
de cómo esa fisiología con la orina tiene otra lectura.
Haga de cuenta que es una auto
vacuna, son dos elementos, el elemento que ingresa, estimula linfocitos y esos
linfocitos empiezan a generar anticuerpos de nuevo.
DR. PABLO SPANGENBERG
– Dr. soy colega suyo pero en ámbitos muy
distintos, estoy en el psicoanálisis, en la psiquiatría y me interesa este
criterio suyo en cuanto puede referir, pienso, a una actitud homeopática si se
quiere, cuando la eliminación de las toxinas son a su vez cura o elemento que
favorece la cura de la dolencia que le aqueja al paciente o doliente, esto bien
puede considerarse homeopático en cuanto la premisa básica es curarse con el
propio veneno; por ello, pienso si acaso si esa actitud nos acerca a la
homeopatía o no…
DR. HÉCTOR COHAN - Yo, cuando empecé todo esto, hace ya como
nueve años, también tenía mis reticencias.
PYD.
¿Hace nueve años ud. empezó a hacer esto en Córdoba?
DR. HÉCTOR COHAN - Conmigo primero y luego seguí con los
pacientes.
PYD.
¿Y por qué empezó por usted?
DR. HÉCTOR COHAN - Porque murió mi padre y yo con mi padre tenía
una relación muy especial y caí en una depresión, en una tristeza muy grande y
me acuerdo que era cerca de la
Navidad y vi una revista que hablaba de orinoterapia. Era en un
kiosco, entonces, le dije al diariero “la llevo”. Empecé a leer, era un artículo
de uno mismo, la empecé a leer y dije “esto es para mi”.
Empecé a investigar y al mes o dos
meses me regalaron un libro sobre terapia urinaria.
Yo soy una persona que no le gusta
depender de nadie y soy muy intuitivo, intuí que la orina podía de alguna
manera, estimularme.
PYD.
Entonces, ud. decidió curar su depresión con su orina…
DR. HÉCTOR COHAN - Así es. Me serví un vaso y la tomé en
demasía, al rato me descompuse, tuve una gran diarrea, me asusté y dije “bueno,
es el principio”. La seguí tomando y después alguien me dijo “esperá un poquitito, tomá de a
poquito”, alguien que sabía más que yo. Y me dijeron también que la diarrea
es una actitud positiva, porque pudo limpiar todo mi organismo.
PYD.
Bueno, también esta eliminando toda la flora bacteriana del intestino que
le hace falta…
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr., ¿entonces porqué no incurrir en la
coprofagia? ¿Por qué no comer lo que es la deposición? Los perros los
hacen.
DR. HÉCTOR COHAN - Yo no incurrí en la coprofagia. Hay una
historia de Robespierre, allá en Francia, que se estaba muriendo y alguien le
había dicho que a través de la coprofagia, podía curarse.
Dicen las malas lenguas que se c…
muriendo…
Lo que quiero decir con esto es que
la ingestión de orina no es un acto momentáneo, forma parte de todo un proceso.
Luego de esa experiencia me regalan un libro de terapia urinaria y al poco
tiempo viajo a Alemania en el momento en que se realiza el Segundo Congreso de
Terapia Urinaria, y ahí había médicos de todos los países que utilizaban la
orina para curar.
PYD.
Dr. ¿Cómo continuó su historia? Después que le dijeron que tomara menos,
¿cuánto tomaba?
DR. HÉCTOR COHAN - Yo tomaba cuarto vaso, mañana, tarde y noche,
porque estaba desesperado.
PYD.
¿Y qué le pasó?
A medida que lo fui tomando, bajaba
la desesperación. Así de claro.
PYD.
¿Era la orina o era ud.?
DR. HÉCTOR COHAN - Yo pienso que era la orina y era yo, porque
yo era un medio para que la orina me estimule. Es decir, su hijo, por ejemplo; a
él no le interesa despedirse del padre, como a todo hijo. A él le interesa que
el padre lo estimule para tener su
experiencia. Y esa estimulación tirar que ser correcta, porque sino también va a
ser la repetición del padre en las cosas malas.
La orina es el modelo del estímulo
correcto.
PYD.
¿A qué le llama modelo del estímulo correcto?
DR. HÉCTOR COHAN - Lo llamo a algo que puede estimular mis
propias defensas y yo ser útil en mi mismo.
PYD.
Volvemos hacia atrás… la orina, ¿no elimina toxinas del
organismo?
DR. HÉCTOR COHAN - No, la eliminación de toxinas se hace a
través de la piel, no se hace a través del riñón. Hay un incorrecto aprendizaje
acerca de la orina. A través de la transpiración sacamos las toxinas y la orina
no es nada más que sangre filtrada.
Hay un libro que lo tenemos todos
los médicos que es la clínica y el laboratorio, donde viene un paciente, le
podemos encargar un laboratorio, sangre, orina…un dosaje bioquímico y de repente
nos encontramos con la orina y cuán sorpresa… en la orina están todas las
hormonas, todas las enzimas. Entonces, si nosotros, a través de una patología
determinada que la podemos comprobar a través de un análisis bioquímico donde me
faltan hormonas, me faltan enzimas, me falta calcio y la orina tiene todo eso,
entonces ¿qué estoy haciendo al tomarla? Estoy estimulando mi organismo ante la
carencia de algo y puedo reciclar lo faltante, por eso decimos que son auto
vacunas.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr. Ud. refirió el origen de este
tratamiento que usted iniciara a una causa de un problema o enfermedad o como la
llamemos, endógena, esto es, cuyo origen era usted mismo.
DR. HÉCTOR COHAN - Correcto. Fue mi reacción ante un conflicto
originado por mí mismo. Pero quiero corregir: yo diría que más que conflicto es
un encuentro. Yo me encuentro con la muerte de mi padre, la desaparición de él,
no lo dejaba partir, me encontraba muy mal, hasta encontrar a aquel que me dice
“dejalo partir”.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr. otra pregunta, esto es referido a un
agente interno, si se quiere, a su encuentro. Esta terapia que usted pregona ¿es
acaso efectiva ante un agente externo que dañe el organismo, cual puede ser un
insecto, un germen…?
DR. HÉCTOR COHAN - Folkloricamente, en el tiempo de que las
personas sacaban la leche desde la ubre, tenían en las manos ampollas, esto se
estigmatiza automáticamente, el ordeñe de las vacas, pero en ese momento las
manos se llenaban de ampollas y ¿qué hacían? Se lavaban con orina.
Si alguien se cortaba en el campo (y
se sigue haciendo), la cortadura como dicen ellos… se orina. Si lo pica una
serpiente… se orina. Por ejemplo, las indias coyas, no tienen una cana; desde
muy chicos se lavan los cabellos con orina. Yo atendí una persona en Buenos
Aires, chilenos de Neuquén, donde ellos, el padre, ya pregonaba desde muy
chiquito que se bañan con orina, no tiene una cana, 73 años. Y tiene que ver la
fortaleza que tiene. Tendríamos que irnos al folklore de cada país para darnos
cuenta que esto existió desde hace 5000 años.
Por ejemplo, en la India, está el río Ganghes
que es un gran orinal, donde la gente dice que es un río milagroso, un río
sagrado y es un orinal…
O sea que cualquier conflicto,
llamalo externo, llamalo interno…
DR. PABLO SPANGENBERG - Con la realidad, podría
decirse…
DR.HECTOR COHAN - De la realidad del
paciente, de la persona, ¿realidad a qué llama?
DR. PABLO SPANGENBERG - Con la realidad de cada
quién…
DR.HECTOR COHAN - Claro,
exactamente, claro que si, porque detrás de esa realidad, hay una imagen
virtual, que está generando un conflicto o desencuentro.
DR. PABLO SPANGENBERG - Efectivamente.
DR.HECTOR COHAN - Esa imagen virtual
la tiene esa persona porque no se virtualizó, no se valorizó.
La orina llega a la persona a fin de
valorizarla. Le exige y de esto hay muchos ejemplos en la historia y en la vida
diaria, que hay personas que empiezan a tomar orina y los síntomas aumentan.
Entonces, yo les digo, dejen de tomar orina, vengan al consultorio, yo los
reviso, vamos a ver el patrón energético, genético que está actuando en ese
momento como escollo para ustedes recibir lo que tienen que recibir. Porque ese
es el principal escollo.
Hay personas que piensan que es una
panacea, que empiezan a tomarlo sin ningún apoyo médico, de un profesional que
sepa del tema y al rato dejan de tomarlo porque se sienten peor que
antes.
PYD.
¿Usted trata el cáncer con orina?
DR.HECTOR COHAN –
Efectivamente.
PYD. ¿Y también trata un resfrío con
orina?
DR.HECTOR COHAN - Si, yo jamás uso
un antibiótico, yo jamás le voy a decir a un paciente que tome antibióticos ante
un resfrío. Si tiene anginas le puedo decir que hagan gárgaras con orina, al
mismo tiempo lo reviso. Esto es muy particular, lo reviso y la revisación, que
es unos minutos, ¿sabe porqué? Él absorbió un tema que lo dejó frío, res es hecho, cosa, cosa fría, entonces
ese frío que está absorbiendo hace que sus vías respiratorias no funcionen bien.
Las vías respiratorias se inhiben en su función.
PYD.
Entramos en lo mágico, en lo mistérico. Vinculado quizá a ese extraño
diseño que hay en el piso, a la entrada de su consultorio.
DR.HECTOR COHAN – No es extraño, es
extraño para la persona que no lo conoce.
PYD.
Con usted no me animaría a decir “vamos a brindar, Dr….”
DR.HECTOR COHAN - Podemos brindar
(risas) Le haría muy bien para el bastón. En vez de tener un bastón, podría
tener su bastón en su propia orina.
PYD.
Yo tengo artrosis.
DR.HECTOR COHAN - La artrosis es un
desgaste fisiológico que responde a algo que después vamos a hacer la prueba y
usted se va a dar cuenta que es la artrosis.
PYD.
¿Qué prueba?
DR.HECTOR COHAN – Lo voy a revisar,
si usted quiere.
PYD.
¿Y entonces?
DR.HECTOR COHAN – Usted va a dejar
de ver la vida destructivamente.
PYD.
Yo no al veo destructivamente.
DR.HECTOR COHAN – Si, la mira
destructivamente porque se apoya en un bastón, no se quiere apoyar en usted
mismo.
En este momento del diálogo, el Dr.
Cohan le solicita al Dr. Spangenberg respetuosamente que descruce sus
piernas.
DR.HECTOR COHAN - ¿Por qué le pedí
al Dr. Spangenberg que descruce sus piernas? Porque quien las cruza está
desfavoreciendo su propia energía y asu vez está diciendo “esto no me importa”. “Lo mío es ley, lo tuyo no me
interesa.”
DR. PABLO SPANGENBERG - Efectivamente pero Dr., no comparto
plenamente su apreciación. Es una distancia que impongo que no implica
necesariamente desinterés.
DR.HECTOR COHAN – Esto que dice
usted Dr., es muy importante por ser usted médico. Usted está imponiendo una
distancia que no le pertenece. Más… ¿Quién no pone distancia?
Conviene entender que -y retomo el
concepto del Dr. Spangenberg del similar similorum, el concepto de la
homeopatía- hay que llegar a la esencia del ser humano. En homeopatía no se
llega a la esencia del ser.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr., Ud. insiste en la homeopatía, entonces
¿la homeopatía, llega a la esencia?
DR.HECTOR COHAN - No, no llega a la
esencia. Es un principio teórico práctico, pero no llega a la esencia. ¿Porque
no llega a la esencia? Porque hay un control energético genético que sirve de
escollo para que no llegue a la esencia ningún producto.
Cualquier persona sabe, no hace
falta ser lego, que se puede ser muy inteligente y de pronto, esa inteligencia
no llega a canalizarse. “Me esfuerzo y me esfuerzo en mis sueños, en mis
proyectos y se pinchan. Ya se acostumbra, lo sigue haciendo y capaz que termina
pinchado.
PYD.
¿No me diga que también lo arregla con la orina?
DR.HECTOR COHAN - Totalmente. ¿Y
porqué con la orina?
PYD.
Dr., acaba de destruir el mito ese de “meado por los perros…”
DR.HECTOR COHAN – Pero, ¿qué hace un
perro cuando está enfermo? ¡Toma orina! Al perro de mi nieto jamás le
dieron medicamentos. Ella sabe que le
tiene que poner un plato con orina, la misma agua le repone la orina de él.
Entonces a través de la orina cuando el perro sabe que el dueño lo
quiere.
PYD.
Sí, marca su territorio con la orina también…
DR.HECTOR COHAN - Claro. ¿Qué hace
el ciervo con la cierva? Habrán visto documentales. El ciervo tiene una glándula
que cuando esta en celo secreta orina en grandes cantidades. El ciervo a
distancia lo huele y empieza la lucha entre los ciervos para servir a esa
cierva.
PYD.
Dejemos en paz a los ciervos Dr. y vuelvo a mi pregunta anterior. Al
entrar aquí vi en el piso un extraño dibujo, ¿puede ud explicarme que
significado tiene?
C - Eso se llama Chacana o cruz
andina.
PYD.
Tiene círculos, tiene un centro de luz, tiene una cruz…
DR.HECTOR COHAN - Y tiene extremos.
Aquí están los cuatro elementos: cielo, tierra, aire, fuego. Y cada elemento
tiene su color y a su vez cada elemento se relaciona con los puntos cardinales.
Cuando se revisa al paciente se lo revisa en forma cardinal, sabemos como entra
su energía en la confluencia ya sea del norte, por el oeste, del sur con el
este. Atendemos a la energía del paciente pero en su punto neurálgico, en sus
puntos cardinales. La chacana nos orienta en un espacio temporal y espacial, es
la conciencia de la otra persona.
PYD.
¿De dónde proviene?
DR.HECTOR COHAN - Es incaico puro.
Hay un montón de datos en Internet…
PYD.
¿Ud. lo utiliza para el diagnóstico?
DR.HECTOR COHAN - Si, y para la
sanación posterior. No curación, sanación.
PYD.
¿Cuál es la diferencia?
DR.HECTOR COHAN - La diferencia es
muy amplia. Porque el médico tradicional, con todo respeto, le va a dar un
medicamento para que los síntomas desaparezcan, eso se llama sanación. Yo
aprovecho el síntoma, jamás lo voy a matar al testigo sino que voy a utilizar la
lectura del síntoma, el cual me está expresando a mi que ese paciente no tiene
no tiene su conciencia propia, sino que está algo infiltrándose y entonces lo
estudio en forma ordenada, en forma cardinal (puntos cardinales) para saber en
qué puntos cardinales tengo que trabajar y en cuales tiene que dormir el
paciente.
PYD.
¿Dr. cuántos pacientes atiende?
DR.HECTOR COHAN - Diariamente son
quince pacientes, esto va de boca en boca. Hoy vino gente de Comodoro
Rivadavia.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr. esto habla de un centro de la
conciencia.
DR.HECTOR COHAN - Esto habla de que
hay que focalizar la conciencia.
DR. PABLO SPANGENBERG - La conciencia está en un centro, no es
excéntrica.
DR.HECTOR COHAN - Es excéntrica
cuando depende de la conciencia genética. Cuando usted tiene un depósito de
energía que no te corresponde y que durante toda su vida rechazó, tiene una
conciencia excéntrica.
DR. PABLO SPANGENBERG - Concretamente, la psicosis, por ejemplo, la
paranoia, ¿la conciencia es allí excéntrica?
DR.HECTOR COHAN -
Totalmente.
DR. PABLO SPANGENBERG - No así la neurosis…
DR.HECTOR COHAN - La neurosis
también es excéntrica. Todas las patologías, sin excepción tienen naturaleza
excéntrica. Porque el paciente, la persona perdió su centro, perdió su
ubicación. Vamos a hacer después, si ustedes quieren, una demostración para que
ustedes se den cuenta de esto.
Es ese gran escollo genético por el
cual la orina muchas veces es incapaz de ayudar al paciente.
Lacan decía “yo soy el otro”, y ¿por
qué lo decía? Un niño, tu hijo, ve en vos cosas que no le gustan ¿y sabes lo que
hace? Te rechaza. Y no ve las cosas buenas tuyas. No las ve por ahí hasta los
cincuenta años, posteriormente, ya es tarde. Entonces, en esa tardanza, en ese
espacio, se va tu padre y te perdiste las cosas buenas de él. Eso se llama “yo
soy el otro”.
DR. PABLO SPANGENBERG - También Lacán dice “yo, la verdad hablo”, es
decir, “yo, como síntoma, hablo. Y habíamos hablado recién que en el síntoma
asiento la verdad que es aquella que el paciente ha de incorporar a si misma
para recuperar su centro según su opinión.
Entonces, “si yo, la verdad hablo” a esto
equiparo, si a cada acto humano usted lo toma como un síntoma.
DR.HECTOR COHAN - Cada acto humano
es un acto de la disminución de la conciencia, de la propia conciencia, es un
síntoma por el cual hago la lectura y me doy cuenta de la reacción del paciente,
la reacción de la persona frente a la acción del otro, cuando hace el rechazo,
inhibe su propia conciencia, su propio campo de conciencia, ya sea izquierdo o
derecho.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr., entonces, ¿requiere una persona
teóricamente sana o mejor dicho saludable, que no padece a los efectos médicos
de enfermedad o síntoma, tomar orín?
DR.HECTOR COHAN - Sí, porque su esencia, cuando la persona
rechaza al padre, ejemplo, su esencia se reprime, se contamina, se contamina con
otra energía que no es la propia. La energía viene del griego “energón”, que
significa actividad.
Entonces, yo puedo tener una
actividad exis pero en un momento dado, esa actividad mía empieza a
contaminarse. Me peleo con papá, no estoy de acuerdo con papá, etc,
etc.
DR. PABLO SPANGENBERG - Dr., perdone que interrumpa, pero ud ha
hecho mucho hincapié en la relación padre-hijo, esto es en consecuencia de su
iniciación terapéutica ha sido en razón de la muerte de su padre, según ud.
comentó. Por tanto parece una elaboración del conflicto paterno esta
terapia.
DR.HECTOR COHAN - Hay un antecedente
muy importante. Mi abuela, en Rusia, jugaba con orina. O sea que yo tuve la gran
suerte de que más allá que yo tenga conflicto como cualquier otro mis genes
estaban embebidos por esa acción de mi abuela. Una gran suerte tuve. Y yo a mi
abuela la venero, la quiero muchísimo. Y mi padre, una persona era fuera de lo
común. Imaginate que yo tenía diez, once años y en la mesa, estábamos comiendo
y de repente me decía, “mirá como muevo esta oreja” y “mirá como muevo este
hueso”. O sea que era un gran maestro que me introduce despacito en todo esto.
Me estimula, me estaba diciendo que la labor del padre es estimular al hijo para
que tenga su propia experiencia.
Pero que hace el hijo? Se estimula a
través de los defectos del padre y pierde su experiencia y ahí es cuando vamos
después al médico, por déficit de atención, porque tenemos problemas de
conducta, etc., etc.…
DR. PABLO SPANGENBERG - Veo su insistencia en centrar el conflicto
paterno…
DR.HECTOR COHAN - No paterno del hijo con el padre nada más. El
mismo conflicto que puede llegar a tener (es una hipótesis, ¿no?) el hijo con el
padre, lo tiene el padre con el hijo.
DR. PABLO SPANGENBERG - Una pregunta que no pude estar sino ligada
a ésta… ¿si el padre acaso representa autoridad de este conflicto bien puede
realizarse con otras autoridades que tuviera esa persona en la vida, docente,
presidente, jefe, patrón?
DR.HECTOR COHAN - Totalmente de
acuerdo. Si él no resuelve su conflicto paterno
no va tener confianza en ningún hombre. Ningún hombre le puede enseñar
nada hasta que él resuelva su aprendizaje con la virtud del padre y del
abuelo.
DR. PABLO SPANGENBERG - En este caso parece el conflicto que
pudiera tener con la madre y sucedáneas, su mujer, hijas, etc.
DR.HECTOR COHAN - Pasa lo mismo.
DR. PABLO SPANGENBERG - Pero ya no es un conflicto paterno… materno
sería.
DR.HECTOR COHAN - Cuando se revisa la persona, yo reviso las
dos raíces. La contaminación de cada uno. Y el paciente empieza a aprender como
salir de esa contaminación por eso se dice que la orina forma parte de una gran
limpieza. Que se hace primero en forma de gotitas para que el organismo se
adapte y después en forma bebible.
En los horarios y esto es
importantísimo, en que esa energía genética ataca. Por ejemplo, cualquier
persona sabe si rinde mejor a la mañana o a la tarde o viceversa, entonces debe
beber orina a la madrugada, porque los otros horarios, esa energía no te deja
rendir, te baja los brazos. Si te baja los brazos en ese horario, cualquier
patología se presenta.
DR. PABLO SPANGENBERG - Es propio de esa situación
depresiva…
DR. HÉCTOR COHAN - Todos, absolutamente todos somos depresivos.
Porque la presión de esa energía es tal que no te permite ser vos. Y eso está
bien claro en los horarios que no podemos rendir.
PYD.
Ahora yo vuelvo hacia atrás. Ud. Tuvo una experiencia personal, Ud. se
sentía depresivo, había muerto su papá, era Navidad, todo en contra. Se tomó un
vaso de orina, fue de cuerpo en demasía, después comenzó a curarse, después se
comenzó a informar, empezó a metodizar la cosa e incorporó otros
elementos…
DR. HÉCTOR COHAN - Mis elementos de la consulta los llevo a la
orina…
PYD.
¿Ud. Venía haciendo cínica general o qué venía haciendo?
DR. HÉCTOR COHAN - Yo jamás hice clínica general. Yo era
kinesiólogo, mis manos estaban educadas para el movimiento. Yo hacía en ese
momento quiropraxia antes de ser médico. Movía todos los huesos y mis pacientes
siempre me decían cuando salían de la consulta “Dr. yo me siento divino, me ha sacado
veinte kilos de encima”. Pero faltaba un dato fundamental: la cabeza. Yo
sabía que en le extranjero enseñaban a movilizar los huesos del cráneo y fui
siempre un insatisfecho de los conceptos médicos actuales. Por ejemplo, nos
decían que el asma no se podía curar, que hacían falta remedios y yo les decía
“pero doctor, porqué viene el asma, la
causa, ¿cuál es?” Y no sabían. La causa de la hipertensión, ¿cual es?
Desconocida. Eso esta escrito en los libros.
Es como reencontrarse nuevamente con
lo que no se sabe y completar el conocimiento.
PYD.
¿Hay algún componente mágico en todo esto?
DR. HÉCTOR COHAN - La vida es mágica. Y la magia fluye cuando
vos sacás la causa genética energética. Es como una llama que
aumenta.
PYD.
A partir del tratamiento que se impuso con posterioridad al fallecimiento
de su padre ¿se siente mejor?
DR. HÉCTOR COHAN - Sí, muy bien
PYD.
¿Sus pacientes se sienten mejor?
DR. HÉCTOR COHAN - El lo puede decir…
PYD.
Su nombre, por favor…
VÍCTOR RAMÍREZ – Víctor Ramírez,
kinesiólogo.
PYD.
¿Qué hacen acá juntos?
VÍCTOR RAMÍREZ – Aprendo osteopatía.
PYD.
Exactamente ¿qué es osteopatía?
VÍCTOR RAMÍREZ – Es una terapia que
permite a través de maniobras manuales reestructurar la estructura
desestructurada. Viene del griego osteo: hueso y patía: enfermedad.
PYD.
el Dr. es profesor, es el que enseña, ¿el único alumno?
VÍCTOR RAMÍREZ – No, somos un grupo
de diez kinesiólogos y médicos que aprendemos esta terapia.
PYD.
¿Nunca los quisieron echar del colegio de médicos?
VÍCTOR RAMÍREZ – Si
PYD.
Ah, me parecía.
DR. HÉCTOR COHAN - Pero ellos entienden que la energía no forma
parte del ser humano, no la quieren incorporar. La ignorancia es de ellos, el
conocimiento es mío. Tampoco es mío, es divino.
PYD.
Lo entiendo perfectamente bien.
DR. HÉCTOR COHAN - la medicina osteopática que nosotros hacemos
que complementa la medicina tradicional nos dice a nosotros que las patologías,
las enfermedades no existen, sino que son reacciones genéticas, energéticas sin
resolver. Donde cada uno a partir de ese desenlace tiene su reacción bioquímica,
radiológica, tomografía computada, etc., etc.
DR. PABLO SPANGENBERG - Que algo me había explicado el Dr. Confone,
cada síntoma entraña una verdad del sujeto, el cual tiene que incorporar. Esa
verdad tiene que incorporarla del síntoma a la verdad.
DR. HÉCTOR COHAN - Por eso quiero que todas las personas sepan
que las pastillas que están tomando, lo único que hacen es retardar la energía
esencial nuestra y acelerar un proceso genético que va durmiendo nuestra energía
esencial o propia y así nos hace simples autómatas. Porque esa energía genética,
lo que hace es determinar que nosotros seamos títeres.
Esa es la verdad de la medicina,
porque educa al paciente, le saca la verdad al paciente, no interfiere en la
verdad del paciente, es a favor de la verdad.
PYD.
Gracias H. Cohan